martes, 31 de octubre de 2017

The road I travelled led to the Comedy Central Fest Colombia 2017

1. Coreografía de mi reggaetón feminista. 

Este Quest empezó en el Molino y El Teatro Bar en 2008, cuando iba a ver stand up todos los lunes y martes y pensaba "yo quiero hacer eso". Este Quest no ha terminado pero hice cumbre en la primera montaña de la cordillera que quiero recorrer, el sábado 21 de octubre de 2017. Este Quest fue alimentado y alentado por todos los lectores de este blog, por mis amigos y por mi familia. Este Quest es, como casi todas las mejores cosas que me han pasado en la vida, consecuencia directa de que me gusta mucho leer y por eso, escribo. 

Yo empecé a bloggear  por ser bien sensible, intensa y emocional. Cuando yo escribía estando en la mierda, a algunas personas les daba risa. Muchos de los comentarios eran "mrk, cómo me reí" y yo ahí con el rímel corrido y los pulmones y el corazón rotos. En algún momento me lo creí y empecé a buscar la teoría. Buscando la teoría, llegué a los talleres de stand up de Reuben Morales, porque algunos comediantes tienen el talento así como de una y los otros lo tenemos que estudiar. Reuben es un profesor generoso, un gran amigo y un tipo que admiro y respeto demasiado. A donde sea que yo llegue con la comedia, habré llegado porque la voz de Reuben ha estado ahí diciéndome cómo hacerlo y gritándome que yo puedo desde hace siete años. No digo esto a la ligera. Al blog le debo la radio y todo lo que la radio me trajo. A Reuben le debo Comedy Central. It took a village, claro, pero de verdad empezó con él y no tengo palabras para agradecerle lo que ha hecho por mí, como profesor, como amigo y como compañero de trabajo. La primera parada del Quest, fue un Halloween, mi graduación del taller de Reuben. Por eso este post se publica hoy. Por eso en Halloween, para ser mega románticos y para entender los poderes de los full circles. 

2. How dare you?! Cuando me dicen jaboncito de hotel.

En algún momento de diciembre, estando de vacaciones en Estados Unidos y con toda mi familia esperándome para almorzar, me escribió por WhatsApp el productor del casting que iba a hacer Comedy Central en Bogotá. Yo sabía que ese casting ocurriría, pero no tenía cómo llegarle, el productor no me conocía y nunca me había visto. Mis colegas colombianos, que me abrieron el corazón y los espacios, a todos los que conozco los amo con la fuerza de mil soles como ama la gente intensa como yo, le hablaron de mí. Me imagino que habrá sido como "hay una veneca nueva que es una tesa, llámela". And he did. Él confió en ellos, ellos confiaban en mí. ¿Cómo les pagaré eso? ¿Alguna vez podré? Le dije que me llamara que justo estaba relibre (not true), y mandé a callar a toda mi familia hambrienta que me esperaba.  No podía salir de la casa porque necesitaba el wifi entonces casi le pinto tres palomas a mi mamá y les pelé los ojos hasta que entendieron. Me invitó oficialmente al callback. Eran dos días, 11 y 12, yo llegaba a Bogotá el 12 de enero. Le dije que si podía ser el 12 y que si no, yo cambiaba el pasaje. ¿Tienes la plata para pagar la multa? No. ¿Tienes familia o amigos que te podrían prestar? Sí. No hizo falta, pero los puse en speed dial por si acaso. Volé hasta Panamá el 11. Me instalé en un café gratis hasta que me botaron y luego en el piso del aeropuerto como una gitana a repasar rutina. Tenían que ser los mejores ocho minutos de mi carrera. Llegúe a Bogotá sin dormir el 12 al mediodía, dejé todo el perolero en casa de una amiga (I was also homeless, no tenía oficialmente casa aquí), me bañé en su baño y salí corriendo a Matildelina. Era la penúltima comediante de la noche, por sorteo. Pasé seis horas trepándome por las paredes, repasando, calentando, parchando cuando se me olvidaba donde estaba y me reía con los demás comediantes y los últimos veinte minutos lo que hice fue llorar. Cuando se bajó el comediante que venía antes de mí, me estaba secando las lágrimas ¡literal! y acomodando el desastre de maquillaje. 

¿Alguna vez han escuchado que los personajes o las obras hacen click? Bueno, yo hice click. En el segundo que ese pana dijo mi nombre yo hice click y salí a matar. Maté de la risa, fue el mejor show de mi fucking carrera. No tuve piedad y mientras más se reían mejor me sentí. Canté Un Huevón como si estuviera en Broadway y me bajé muy muy muy contenta con lo que había hecho, dando brinquitos potterianos de la emoción. Se acabó la noche y me fui beber.

Más de seis semanas después nos dijeron quienes habíamos quedado. NIÑITAS; YO QUEDÉ. La única exranjera entre menos de 20 comediantes de casi 50 que hicimos el callback fuimos escogidos. NIÑITAS GANAMOS. Aaaaah, pero cuando uno canta victoria antes de tiempo... En la grabación, no me fue tan bien. Ojo, no me fue mal, pero no me fue como me fue el día del callback. Igualitico grabé y esos seis minutos serán el primer brainbaby del que sacaré fotos y videos en mi celular para mostrarle a la gente que sí tengo hijos. Esos seis minutos son mi Atenea, los sixtillizos de mi cabeza. De mi cabeza que a veces me enorgullece tanto y que me atormenta todas las demás. No estoy 100% contenta con el desempeño de esa noche y por ahí empezó todo. No me fue mal, pero no me fue BOOOOOOM PERRITAS. Quería repetir la hazaña del callback, no pasó. Mientras más tiempo paso en Bogotá más coñazos recibo, más pobre me vuelvo, más me autoflagelo, más infeliz soy. 

Siento que permití por meses a mi personalidad escénica cargarse de eso. Montándome y montándome, cada vez me iba  peor. La última risa estruendosa, antes del sábado, había sido hace tanto tiempo que de verdad no me acuerdo cuándo fue . Por un milagro de Atenea o de Apollo o de la Virgen María o de cualquiera de los dioses en los que soy capaz de creer cuando las cosas van mal, Comedy Central me llamó para estar en el Comedy Central Fest Colombia 2017. I did not feel worthy, pero de booooolas que eso no me iba a detener. A partirse el culo repasando hermanita, a hacer todo, absolutamente todo lo que esté en tus manos para reivindicarte. Para perdonarte por fracasar todos esos meses, a hacer todo por soltar lo malo, por deshacerte de las malas vibras que te hacen una comediante destalentada, perdónate por no dar la talla, por cagarla tan a menudo, por ser tan dura contigo, por no dejarte ser quien eres sino inventarte una hija de puta que a nadie le cae bien y por eso no se ríen, a perdonarte por atacar cuando no se ríen, no es culpa del público cuando eres mediocre y cobarde, perra... 

Perdonarme por decirme esas cosas horrendas de vez en cuando y por hacerme tanto daño cuando no sé salir del espiral de miseria y autodestrucción. 

Viajamos el viernes 20 al mediodía. Fun fact: el día antes fui al estreno de Tamara en Bogotá, que abría un festival de cine aquí y como la propia inmigrante pelabola me tomé todos los rones que pude en el brindis, más un vodka que me autoregalé cuando fuimos a cenar. Mi profe estaba feliz con su peli y yo estaba feliz por estar con ella. No en ella tipo estar en la película, que obviamente sí estoy, sino con ella, la directora. A esa mujer le debo la actriz que soy y for reaaaalzzzzz, soy requetebuena. Entonces llegué a la casa tarde y borracha. Tarde y borracha, hice la maleta. Drunk me overpacks, pero no se viste mal. Por primera vez en mi vida llevé un carry-on a un viaje de menos de 48 horas de duración. Opciones no faltaron, llevé como cinco pintas sólo para las dos apariciones en tarima y como tres más para los días ahí. Llevé bikini para y que tomar sol, pero hubo nubes. Tantas nubes que el día del festival llovió a cántaros (Bogotá, me persigue tu clima. Why?!) y los productores del show tuvieron que condensar todos los eventos en una tarima. Por cierto, lo lograron. De verdad qué placer trabajar con gente capaz y profesional. Fue una odisea and they passed and succeeded, with flying colors. 

Aterrizamos en Medellín a la 1:11pm, ocho comediantes y mi maleta (de la que nadie se burló porque todos viajamos con perolero, like I said: stakes were fucking high). Algunos como yo, bien enguayabados (así se dice enratonados en colombiano). Dejamos las vainas en el hotel y fuimos a comer. ¿Qué haría una persona normal después de comer? Descansaría antes de la reunión de producción. ¿Qué hace una inmigrante que quiere reafirmarse a ella misma y a los demás que merece estar ahí? Estudia, escribe y repasa. Dormir es para los débiles y los débiles no tienen parches mágicos que compran en tiendas de belleza que desinflaman las bolsas y aclaran las ojeras. Drunk Nina metió ropa y zapatos de correr en la maleta, pero es porque ella es muy optimista. Sober Nina no los usó. Sober Nina es Hermione. Sober Nina siguió dándole vueltas a los chistes del roast, en bloques perfectamente organizados de veinte minutos por comediante y veinte minutos para mi rutina. Sober Nina bajó a la reunión de producción con una libreta y como nadie anotaba, no la sacó. Shame. Una Hermione saca su fucking libreta y anota todo lo que le da la gana pero ya me habían hecho demasiado bullying por lo del roast. Estaba full emocionada porque me iba a reencontrar con un súper amigo de Comedy Argentina que hice cuando grabamos y bajé como a las seis a hablar paja y echar vaina. 

Sober Nina conoció a Ezequiel Campa. Del cartel de los famosos internacionales, fue el único que llegó a la reunión. Así fue la vaina: 

Por fuera: 
–Hola, Nina Rancel, un placer. 

Por dentro: 
–MODERFOKER ERES DORA LA LOGRADORA MARICAAAAAAAAA, LE ESTÁS DANDO LA MANO A EZEQUIEL CAMPAAAAAAAAAA. 


3. Nina, tu ídolo. Tu ídolo, Nina. Ya, el día que conozca a Tina Fey puedo morir en paz.

Tuvimos nuestra reunión, la verdad es que estábamos todos demasiado alborotados e inquietos. Creo que ninguno quiso demostrar la emoción que sentía por estar ahí. Estábamos playing it cool y cuando los comediantes tratan de ser cool, son bullies. De ahí fuimos todos a comer, finalmente nos dieron viáticos para la cena, la demostración de pobreza colectiva en el almuerzo fue verdaderamente deprimente. Éramos como 20 personas, o bueno, semipersonas porque casi todos éramos comediantes y no contamos como personas completas. Fuimos a comer costillitas deliciosas y a tomarnos algo todos. Era como un campamento. Un campamento con 20 campistas desadaptados, despeinados y reventados del cansancio pero dando lo último porque we were there. 

I had two options: be cool or be intimidated. I chose both. Por dentro me hacía pipí de los nervios. Por fuera, I was the slickest, smoothest, most interesting and friendly comic de todo el grupo. Yo admiro el trabajo de Ezequiel Campa desde hace nueve años, jevas. Soy FAN del bicho desde el primer video de YouTube que vi. No existía Twitter. That's how long ago this was. Es como que eres cantante pop y un día eres la telonera de Lady Gaga. Es como si fueras, qué sé yo, chavista y un día te convierten en repartidor de CLAP.  

Por dentro: marica, keep it cool y respira, no te hagas pipí huevona. Estoy más despeinada que nunca, eso es bueno. Gracias Drunk Nina por meter estas vainas en la maleta, yo nunca me hubiera venido así de elegante. Entiendo todo lo que quiere decir porque soy tan fan que sé hablar argentino, no jodaaaaaaaaa.
Por fuera: cambia esta palabra por esta y listo, te entienden. Pásame la salsa de tomate. 


4. Esta foto la pongo aquí porque es perfecto como la C enmarca mi  linda y poderosa cabecita 

5. Mostrándole al público como no tengo tetas, ni de frente ni de perfil... o bailando algo 

Al día siguiente era el show. Tenía que estar ahí a las 4:00 pero me fui en el bus de las 2:00 porque estaba demasiado ansiosa. Me gusta llegar antes para conocer los espacios y calmarme. No tenía wifi ni datos entonces no pude montar todas las stories que quería. Mi cámara está jodida entonces todas las fotos que ven aquí la tomaron amigos comediantes, productores y público general. Quizás eso fue bueno porque en vez de estar pajareando en redes I got shit done. La lluvia retrasó todo. En verdad fueron tantas horas que pude echar vaina con todos los comediantes y todos la pasamos muy bien. Una vez más, soy que si pana de Ezequiel Campa, alguien llame a Nina 2008 para que no se suicide, que lo que viene es bueno.  Estuvimos echando vaina, ¿entienden? Que si bullying porque era muy bajita, que si a que hora te toca, que si tengo hambre, que si ayúdame con mis chistes del roast, escucha esto, que si dónde está el baño, que si muévete del sofá que me quiero sentar... Dios sabe cuando le tiene que mandar las cosas a uno. Esta vaina me hubiera pasado hace cinco años y me desmayo, me desmayo como una quinceañera margariteña en un concierto de Servando y Florentino. 

Chévere que estuvieras jugando a la mariposa social, chévere que estuvieras haciendo amigos nuevos, chévere que pidieras ayuda escogiendo outfit, pero mija, ya vienes tú. El fucking rush de adrenalina. El presentador, un caleño que me parece un huevo llamado Juan Giraldo, la está partiendo. Mute. Silencio. Mñbsshhmghshjha Nina Rancel mñbshhhhh. Estoy en el escenario, tengo el micrófono en la mano y empiezo a hablar. Hay casi 2500 personas escuchando esto. ¿Cómo es que es la fucking rutina? No tengo tetas, soy bajita, por eso me fui del país de las Misses. Primera risa. 

It's on, bitches. 

No tengo novio. Este es el momento donde todos ustedes fingen sorpresa. Hagan QUÉÉÉÉ? 2500 PERSONAS, mis perritas. Haciendo lo que les dije, riéndose donde yo mando, fingiendo sorpresa porque I am in control. Yo no soy lesbiana. Tú tampoco tienes cara de lesbiana, señalando al vacío. 25 mujeres creen que es con ellas, todas se ríen, ninguna se ofende. Están conmigo, están ahí. Piensan "mrk, soy yo demasiado." Cualquier mujer puede ser todas las mujeres, lo que pasa es que sus pensamientos no tienen amplificador. Yo escribí los míos y los digo con micrófono. Reggaetón feminista. Boom, soy Nina from the Blog + Nacha + China + Yandel, sin la misoginia. Tinder, fuck fuck fuck, qué viene, cuánto tiempo tengo? Sabes qué? La estoy partiendo, prefiero irme en la gloria que aflojar ahorita. BOOM. Un Huevón. Mal cantado porque estoy fumando mucho, pero dio burda de risa.

¿Qué pasó? No estoy clara. ¿Cómo lo hice? No estoy clara. ¿Qué detonó el click? Ni puta idea. Lo que sí sé, es que me senté a ordenar la rutina. Cada coma, cada punto, cada espacio, cada silencio. Lo que sí sé es que el rush de adrenalina steered the way. Iba a hacer el bit de Tinder, pero sólo hice los chistes más fuertes. No hice Tinderbell porque se me olvidó. También se me olvidó lo feliz que soy cuando soy buena. Se me había olvidado que donde haya un escenario, yo estoy en mi casa. Se me había olvidado que soy fan mía, cuando hago lo que en el fondo sé que soy capaz de hacer. Se me había olvidado lo feliz que soy cuando transformo mis complejos en bits para que la gente se ría. Se me había olvidado que puedo ser cuchi, frágil y vulnerable porque eso es lo que soy. Quiero ser una hija de puta, pero no lo logro y por eso me odian y no se ríen. As God as my witness, nunca trataré de ser hija de puta de nuevo. Lo seré solamente cuando me nazca, pero no la voy a forzar.  

6. Nunca antes en la vida había hecho comedia en falda, pero este roast lo requería. Mi contrincante es muy famoso y necesitaba todos los puntos posibles de entrada. 

7. Roast, cuando ya había salido de la parte más cagante y mi contrincante hizo un chiste bueno que los sacó a bailarme Turn down for what. 

Unas horas después, venía el evento que más me asustaba. El Roast de Comediantes. 

Odio con la fuerza de mil soles cuando dicen "calladita te ves más bonita," pero así pasé todo el fin de semana. Naaaaadie pensó que me podía ir bien. Todos los comediantes me decían que me iban a volver mierda, que habían escuchado los chistes del otro y que seguro eran mejores que los míos. Pasé todo el fin de semana mordiéndome la lengua, sin responder nada a eso, haciéndome la loca, como si se me hubieran olvidado los chistes. Fingiendo demencia (o decencia). 

También sé que empecé a escribir los chistes del roast 10 días antes, que stalkeé a tooodoos los contrincantes del roast y volví a the basics, escribiendo premisas primero sobre ellos y poco a poco los remates. Llamé a uno de mis amigos más coño de madres y me ayudó con un par de chistes. Lo que más me gustó del roast fue que me atreví a hacer cosas fuera de mi comfort zone en el nombre de la desesperación. A ver, no me gusta aprovecharme en la tarima de ser linda–muchos dirán que soy bien huevona y tienen razón–pero es porque ser linda no da risa. Ser linda puede hacer que quede en algunos castings, pero al final, en stand up, la gente no se ríe de que tengas buenas piernas, buen culo o los ojos grandes. La gente se ríe de lo que tu cerebro inventa y de lo que tu boca dice. Entonces, nunca había hecho comedia en falda y tacones pero aquí necesitaba every tool possible. Me entaconé y me puse falda porque necesitaba que el público me quisiera de entrada... ¿Me van a aplaudir más las piernas? Sí, suma. No me jodan, no es desleal. 

Mi primer chiste fue un palo. Uno bueno, uno a la yugular, uno bueno, uno a la aorta, uno bueno, uno al estómago, uno bueno, uno al autoestima, y así.  Mi último chiste fue improvisado, me llegó por inspiración divina en ese momento: 

"Él seguro se va a burlar de mí porque en mi país no hay comida, ni papel higiénico ni medicinas. La cosa es que no estamos en mi país, Ibra, estamos en Colombia. Y en Colombia sí hay vaselina, que te he debido poner en el culo antes de esta culeada (cogida) que te acabo de echar."

Él hizo chistes chéveres. Ninguno increíble, ninguno memorable. E igual la fama lo salvó. Lo aplaudieron un poquitico más duro que a mí y pasó ronda tras ronda hasta ser subcampeón. ¿Saben quién ganó? Yo. Varios comediantes, organizadores y personas del público que si "marica, te robaron." No importa. Para mí, yo gané. Sí huevona, para ti. So? No importa, yo gané. Gané because of fucking Kuyashii. 

Kuyashii es una palabra japonesa que descubrí por Chef's Table. Significa que usas las palabras de quienes dudan de ti para motivarte y seguir trabajando hasta que you prove them wrong. Ese día todos admitieron que they were wrong. Sólo uno de los comediantes dijo que iba a ganar yo. Él será quien abra mi Madison Sq Garden show entonces. Entendí el poder de quedarse callada. Déjalos que piensen que no te sabes defender. Deja que tu adversario entre sobrado. Tú calladita tienes más tiempo para pensar y escribir. No gastes energía defendiéndote de unos insultos que no estás en el roast todavía. Calma, reina. No hagas show, que no hay tarima. No contestes. Que crean que estás cagada y underprepared y que no tienes la agilidad mental para responder estos chistes sobre ser bajita que tienes 20 años escuchando. Ssssshhh. Nunca subestimen a nadie, sería cool que tampoco insultaran la inteligencia de nadie, pero yo soy la primera hater entonces ese consejo no lo voy a dar. Al final, todos me dijeron "tú ganaste" y hasta me pidieron perdón, "qué bonito cuando alguien te calla la boca así como tú me la callaste, Nina". 

Última cosa: ese día éramos como 30 comediantes en total. Entre los del open mic, los de media liga y los cerradores así megafamosos del primetime. Sólo cuatro, éramos mujeres. Las cuatro somos muy diferentes, venimos en tamaños estilos y presentaciones diferentes. However, fuimos las únicas cuatro ahí. ¿Cómo les explico el orgullo? ¿Se los explico? Liss era la headliner de la noche, Pamela y Cata la partieron, yo la partí. A mí mis papás nunca me dijeron "ay, qué cómica eres," I just had impulses and I followed them. No sólo creo que debería haber más mujeres haciendo comedia, creo que todos deberíamos fomentarla. Las mujeres, creo yo, tendemos a hablar de temas más personales y privados. No sé, a mí me gusta porque somos más vulnerables y es más lindo. Equis, eso depende del estilo. Además, el triunfo de una es el triunfo de todas. Yo celebré la victoria de Pamela en el roast como si Maite Delgado me hubiera puesto mi banda y mi corona de Miss Comicidad 2018. Sí, algunas estamos encabezando la lucha pero es porque empezamos primero. Siempre he dicho que las de atrás vienen conmigo y me hace muy feliz que estemos pavimentando el camino para que las que siguen no la tengan tan jodida. No estoy diciendo que es que, ah soy la Mujer Maravilla y las voy a salvar a todas. No, estoy diciendo que hay algunas cosas que ya a mí me pasaron y que, esperemos, no te van a pasar a ti porque ya me tocó, lidié con eso y espero haber enseñado las lecciones correctas al público o a los productores de los shows para que no te pasen a ti. 

                                    
8. A mí me habían dicho que para ser comediante había que tener un pene. 
Es mentira. Hay que tener un gran cerebro y a veces un micrófono. 

It has been a long way to the middle. Sé que no estoy ni cerca del top. Ojo, nunca había estado tan segura de que voy al top como ahorita, pero estoy clara, sé que falta mucho. Estaba muy cansada pero esto fue como tomarme tres latas de Red Bull. I feel like Kimmy Schmidt: Unbreakable. Me hace muy feliz ser talento Comedy Central. Me hizo muy feliz haber tenido ese fin de semana. Necesitaba sentirme talentosa de nuevo. Necesitaba valorarme y tener algo, lo que sea, algo a lo que pudiera aferrarme cuando por pajúa vuelva a creer que estoy fracasando. El Comedy Central Fest Colombia será para siempre un salvavidas que abrazaré cuando dude. Cuando no me lo crea, cuando esté mal, cuando la cague, cuando me odie, cuando me sienta débil y frágil, cuando crea que no voy a poder, me acordaré de Medellín y de cómo me culeé a 2500 personas y enamoré a 30 comediantes, al mismo tiempo. 

lunes, 23 de octubre de 2017

Hoy es un gran día porque fue un gran fin de semana

Casi siempre ando bien emo por la vida. Hoy no es casi siempre, hoy es la excepción de la regla. Hoy es uno de esos días que hacen que los días de mierda valgan la pena. Uno de esos días que son para sentirse talentosa, capaz y #DoraLaLogradora. 

Después del callback para Comedy Central sólo tuve un buen show. Un show en el que dije: "oye, sí, la partí." Muchos pésimos shows, muchos shows mediocres, máximo cinco shows entre mediobuenos y dignos. El sábado fue un gran show. Técnicamente dos grandes shows, porque salí al escenario dos veces. Uno con rutina y otro para el roast de comediantes. 

Es una gran alegría no salir del escenario con ganas de llorar. Lo extrañaba horrible. Temblando por la adrenalina y satisfecha por un trabajo bien hecho. Es maravilloso compartir escenario con gente megapala, gente que admiras desde hace casi una década como Ezequiel Campa; desde hace meses como Gato, Pamela Ospina, Catalina Guzmán, Paulo Hernández, Checho Leguizamón, Brayan Mora, Juan Giraldo, Diego Mateus, Diego Camargo y desde hace días como Fran Hevia. 

Es mayor la satisfacción cuando todo lo hiciste solita y calladita. Es mejor la satisfacción cuando no tuviste que joder a nadie ni hablar paja de nadie ni acostarte con nadie para llegar ahí. Es mejor haberlo hecho todo sin padrino, sin nadie famoso y más poderoso que tú que te abriera el camino. Es mejor haberlo levantado todo desde la nada. Tú solita con tu blog, tu creatividad, tu cultura general, tu inteligencia, tus ideas, tus fortalezas pero especialmente con tus debilidades. Es mejor haberlo hecho con mil cursos y mil libros. A mí nadie me puede quitar lo baila'o y lo estudia'o tampoco. El que diga lo contrario va a tener que venir a decírmelo en mi cara y recibir odio condensado porque hoy no pueden rain on my parade. Y porque yo puedo ser mil cosas, pero floja no es una. Es mejor haber transformado mis más profundos dolores en chistes que hacen reír a la gente a costa de mi dignidad. Es mejor que estar hablando de lo exitoso que eres desde el ego desproporcionado. Es mejor partirte el culo para tratar de ser la mejor comediante que puedes ser a haber tenido suerte y ser hiperfamoso en un país profundamente mediocre y creer que ser famoso es igual a ser cómico y comediante. 

He sido impaciente toda mi vida. He sido atorada e imprudente siempre. He sido fastidiosa, terca, arrogante, débil y mil cosas más en ese trayecto. Cuando estaba empezando a standupear le preguntaba a un comediante que me ayudaba full con la rutina cosas como "cuándooooo, coño, cuándooooo voy a poder hacer esoooooo así" y siempre la respuesta era la misma, que el kilometraje en stand up no se puede saltar. He hecho stand up en cuatro países y dos idiomas y siempre me ha dado rabia gente que no es standupera y gira por el mundo porque son famosos por otras razones que no son el stand up. Me alegra, perdón pero sí me alegra, cuando fracasan estrepitosamente por haberse saltado por su arrogancia la roncha de probar material, fracasar en bares, lidiar con misóginos borrachos o mujeres envidiosas, hacer que el público deje de querer cogerte para reírse contigo, lidiar con hecklers y ni tomarse la tarea de entender el humor. Me alegra cuando reciben dosis de humildad que los mantiene lejos de los escenarios que los demás comediantes sí nos hemos labrado. 

La alegría de haber logrado lo del sábado es priceless. Ustedes no entienden que a mí ninguna productora yq famosa de shows grandes me consideró en Venezuela, a mí nadie me puso a girar, a mí nadie me ofreció hoteles cinco estrellas en ninguna ciudad de Venezuela. Yo lo que estoy haciendo lo he hecho sin peluca y sin Vine. Yo lo que estoy haciendo lo he construido ladrillo por ladrillo, chiste por chiste, fracaso tras fracaso. Yo estoy demasiado orgullosa de lo que sí he cosechado. Yo estoy feliz porque todos los que yo sé que están hablando mariqueras van a tener que callarse la boca algún día, sería cool que empezaran tipo ya. No es mi deber caerles bien o jalarles bola, no quería hacerlo cuando estaba en Venezuela y eso me costó demasiado trabajo y me cerró demasiadas puertas. Al cabo que ni quería, bitches. Si les hubiera jalado bola no estaría en Comedy Central, like you people. 

Yo me jodo y me duele horrible cuando mi material sobre libros no funciona. Me duele porque siento que es el material más inteligente que tengo y nadie lo entiende. Si lo entendieran les daría mucha risa. Igual, lo seguiré haciendo con fe. No voy a dejar de hacerlo. Lo haré hasta que, como en España, alguien lo vuelva a entender. Pero hoy no es para el dolor, hoy es para celebrar los chistes que sí entienden. Que siempre podrían ser más o podrían ser mejores, claro que sí. No lo discuto y sé que debo sentarme a escribir cosas nuevas urgente. Que estén a la altura de todo lo demás, urgente. 

Estoy orgullosa de mí y de mi Ítaca. Estoy orgullosa del cerro de bola que le he echado. Estoy orgullosa de poder decir que lo construí a punta de sangre, sudor y lágrimas. No tuve contactos, tuve profesores. No tuve padrinos, tuve aliados y amigos. No tuve productores, tuve comediantes ayudándome todo el camino. Comediantes a los que admiro, respeto y siempre, siempre, siempre trataré con cariño genuino. A ellos les llegará su sábado también, como a esta pequeña cochinita. 

Espero que nunca se me olvide esto. Este momento, esta alegría y esta satisfacción. Espero que nunca se me olvide la cara de la gente con la que he trabajado y no me saluda porque "no se acuerda de mí" pero más importante, espero que nunca se me olvide la cara de toda la gente que algún día ha querido tomarse una foto conmigo al salir de un show. Espero que nunca se me olvide lo rico que se siente ir por lo que quieres y seguir siempre trabajando. Espero que nunca se me olvide quién soy y qué soy capaz de hacer, aunque ellos no lo sepan, ni les importe. 

Obviamente uno no es monedita de oro. El humor es subjetivo y no todos los chistes son para todas las personas, no todos los públicos son para todos los comediantes y viceversa. Eso se entiende. Habrá gente que diga que yo soy muy mala, cuando lo que deberían decir es que no soy su estilo. Hay otro tipo de gente que odia que una mujer hable de ciertas cosas, a ellos sí les pinto palomas sin remordimiento. Hay gente a la que sencillamente no le vas a parecer cómica y eso está bien. Uno no se pelea con gente que te odia, uno aprecia al que lo quiere y ya. No soy monedita de oro pero el otro día fui el cup of tea de 2500 personas al mismo tiempo. 

Me siento como un fucking phoenix. 

miércoles, 18 de octubre de 2017

Cosas que me han pasado siendo actriz

Una vez estaba escribiendo una película con el director de la peli y el otro productor. Teníamos un guión sobre cinco mujeres que eran amigas y cinco tipos que no eran amigos pero querían con estas cinco mujeres y se unían para lograr acercarse al grupo. 

Perdón, director debería ser entre comillas porque ese bicho decía que era director pero no dirigía ni el tráfico. Estábamos en plena preproducción y la verdad es que hacíamos un buen equipo coescribiendo el guión. Un día, se retira la protagonista. ¿Qué coño haces tú escribiendo y consiguiendo el dinero para hacer una película si ni la vas a protagonizar? Equis, en ese momento era algo y el director era el de la idea inicial entonces me jodí. No lo peleé porque estaba pasando por un momento tan malo que me conformaba con migajitas. Sigo en un momento malo, pero ya no me conformo. 

Me había desviado. Entonces, la prota se echa para atrás y este señor consigue, literalmente en un café, a una niña que le daba el look que él quería. Una niña espectacular, por fuera y por dentro. De la nada, nos dice esta semipersona que va a encerrarse todo el fin de semana a darle con el guión. Cool, el otro productor y yo nos quedamos callados. La semana siguiente teníamos una lectura del guión y cuando llegan las copias: TAH FUCKING DAH MOTHERFUCKERS. La semipersona cambia todo el puto guión, toda la fucking historia para que ahora, mágicamente, su personaje termine haciendo un trío con la nueva. Fun fact, esta niña no era actriz pero era modelo y bien pilas y concluimos que entre todos le sacábamos lo necesario. Se veía súper pilas y demasiado dispuesta a aprender, entonces I let that shit go. En contra de todos mis instintos porque la carajita me caía bien, dije "qué importa que no sea actriz" lo que me hace una bruta y una traidora, obvio. 

En plena lectura todos los actores comentaban que la peli era bien diferente y que la historia ya no era lo que les habíamos vendido. Yo le hice dos comentarios sonriendo y en privado, como que "bicho, esto no era" pero dejé eso así. Me dejé marinar en jugos de calma y paz unos días porque necesitaba ser profesional. Si no me calmaba, iba a matar gente. Iba a matar al mamagüevo que agarró nuestro guión y lo convirtió en otra cosa distinta a lo que era, sólo para que él pudiera tener un trío en pantalla con una mujer que en la vida real estaba demasiado fuera de su liga. 

A los días, yo evadiendo llamadas y evitando reuniones, invité por el chat de la peli a que fueran a verme haciendo stand up en Teatro Bar. Esta semipersona fue a ver el show y lo que hizo fue hablar durante los 25 minutos que yo estuve en la tarima. Me bajé y evidentemente lo que hice fue beber. Temblaba de la arrechera. Mi único error en todo este proceso fue tener saldo para llamar borracha a este cabrón. 

A ver, no he debido decir borracha algo que era verdad y que él se merecía que le dijera sobria. Lo llamé y le grité lo siguiente: 

SACA TU HUEVO DE MI GUIÓN, HIJO DE PUTA. Claaaaro, como sabes que nunca en la puta vida te podrías coger a esa chama cambiaste toda la historia para que convenientemente tu personaje tuviera algo con ellaaaaaaaaaaaaa, maldito enfeeeeermooooooooo hijo de putaaaaaaaaaaaaaa. Nosotros nos reunimos con gente y les contamos un cuento totalmente diferente. Yo no voy a levantar la plata para que tú puedas cogeeeeeer maldito. Saca tu huevo de mi guión o te retiras del proyecto, etc. 

No pudo negar nada. Cuando piensas con el pene, no puedes negarlo. Los demás nos damos cuenta y tu cerebro está mandando sangre a tu erección, entonces no puede ni inventar mentiras para defender lo indefendible, animal. 

Fui el antónimo de seria, profesional y respuetuosa. Él también, pero sus patanadas no excusan las mías. No he debido hacerlo borracha. He debido decirlo en una reunión de emergencia, convocada por mí porque I'm fucking producing the thing. "Mira, marico, tanto Productor X como yo sabemos que esta movida es para que tú puedas darte unos besos y hacer como si te la cogieras. O te sales del proyecto como guionista o como actor o como director. No, sabes qué? Paja. te sales del proyecto como actor porque yo no voy a conseguir miles de dólares para que un pajúo lo meta en la ficción en lugares que son inalcanzables para él en la realidad. La verdad es que con gente como tú no se debería trabajar. Mejor agarro mis inversionistas y me voy para el coño de la madre, de donde tú nunca has debido salir." 

Después de que reventó ese show, me sacaron del grupo de Whatsapp y con la misma llamé a la niña nueva para contarle lo que había pasado y advertirle que este patán la había casteado por las razones incorrectas. Hace varios años un director de casting que respeto mucho y que era mi amigo me prohibió que hiciera El Psiquiatra de Manuel Pifano. Me contó quién era Manuel Pifano y el tipo de cosas que hacía antes, durante y después de los rodajes. Yo había quedado en una película, mi segunda película y estaba muy contenta. Me repitió las palabras de su mentor: "la carrera de un actor no se construye con los papeles que acepta, sino con los papeles que rechaza." 

Le repetí como un loro a esta chama todo eso. Que una vez a mí alguien me había salvado de estar en una mala película con directores locos y que gracias a eso mi carrera fue más digna, que la historia era así al empezar y que él cambió todo para que mágicamente ahora hubiera un trío con ella. Ella se indignó, renunció y seguimos siendo amigas. 

Él nunca consiguió la plata y no ha podido hacer la peli. 

Moraleja: el arte y el trabajo son mucho más importantes que tus deseos sexuales. Nunca escriba excitado, hágase la paja primero. Si me ve, escóndase. Si alguna persona de su equipo no tiene toda la información, ayúdela! Es decir, dale la información completa a quien no tiene acceso a ella para que esa persona pueda tomar una decisión informada y no tenga que besar a locos pervertidos frente a cámaras.  
 

viernes, 6 de octubre de 2017

No estaba muerta, estaba mintiendo en Instagram

Empezó hace un año y pico. Leí en Miastral, fuck that website, que uno tiene que proyectar lo que quiere ser para que las cosas lleguen. Entonces empecé a mentir. 

Estaba, y creo que sigo estando, frustrada y cansada por sentir que todo el trabajo ha sido en vano. Pero como un borrego, empecé a decir en Instagram que todo estaba bien. Escogiendo fotos y videos estúpidos que no siempre son un reflejo 100% real de cómo me siento o cómo percibo que me está yendo. Empecé a montar puras fotos y videos cuidadosamente ideados para hacerle creer a la gente que la estoy "partiendo". Inserte risas enlatadas aquí. Risas enlatadas es lo único que me merezco, honestamente. 

Llegué a Venezuela hace un mes y después de los saludos clichés, el consenso era: "Chama, estoy demasiado orgullos@ de ti, qué bolas cómo la estás partiendo en Colombia, vale. Sigue así." WTF? 

Lo que sea que haya hecho, funcionó. Mis compatriotas, mis amigos, mis conocidos y hasta la gente que me odia cree que de verdad estoy que si triunfando en esta ciudad. Pero vengo aquí a decir la verdad: no la estoy partiendo. Tooooodo lo que han visto fue diseñado para que la gente creyera que me va mejor de lo que me va, porque nadie quiere ver un Instagram Live de cómo hago para rendir el pollo y la emoción que siento cuando una vez cada dos meses me da para hacer un buen mercado. Nadie quiere ver un selfie de una gente que llora porque no sabe cómo va  a pagar alquiler este mes, aunque siempre lo logre al final. Yo sé que me podría ir peor, pero que te vaya mal no es chévere tampoco. Eso es otra vaina hippie que detesto: "agradece lo que sí tienes." ¿No les parece que entonces uno no tiene derecho a querer más? O sea, son excluyentes o es que no estoy entendiendo la idea general? 

Fui muy cuidadosa escogiendo a quién decirle la verdad en Venezuela, para nada. Porque igualito vine a decirlo aquí. No la estoy partiendo. Tengo mucho menos trabajo de lo que quisiera, gano mucho menos de un sueldo mínimo al mes y ya se me acabaron los ahorros. Bogotá es carísisisisisisisima. Estoy sobreviviendo como una campeona, pero no soy feliz ni me siento tranquila. No es que no tengo para lujos es que a veces no tengo para lo básico. Evidentemente estoy cero acostumbrada a los lujos, pero hay una gran vaina llamada la Pirámide de Maslow y niveles de la pirámide que aparentemente no se pueden saltar. Surprise, motherfuckers! Tuve que irme de Venezuela para entenderlo. Mi profesora de psicología en cuarto año tenía razón. Who would have guessed? 

Nadie quiere ver una foto en IG de una jeva refugiada en los pocos libros que tiene. Libros que ha releído tantas veces que está a punto de aprendérselos de memoria. Nadie quiere ver stories donde la protagonista cuenta las moneditas para recargar la tarjeta TuLlave. ¿Cuál es el gran atractivo de un Instagram Live donde la que transmite engorda y engorda porque compra pura comida que rinde? 

Eso sí, las pequeñas victorias suman y emocionan. Cuando uno es tan infeliz hay cosas chiquiticas que pueden hacerte sentir invencible. Hace como tres meses pude comprar pescado y me sentía como la Loba de Wall St. Cuando me hago las manos y los pies, que son 10 dólares solamente pero para mí eso es un ojo de la cara, me siento como Jackeline Onassis entrando a su spa. Cuando puedo comer en restaurantes, alias puedo y tengo que pagar un corrientazo (como un almuerzo ejecutivo) porque no me da tiempo de regresar a la casa o algo, me siento como si estuviera comiendo en donde un chef con 30983738 estrellas Michelin. Comer una comida que no tuviste que cocinar tú es muy chévere. No tener que lavar los platos es como "najada, soy el sultán de Brunei, making it raaaaain, bitcheeees!"

Son pequeñas las victorias, pero son las que tengo y he descubierto que celebrarlas me ayuda a mantener la paz. Me da mucha calma y un poquito de impulso. Insisto, al final siempre resuelvo pero el Antes de Resolver is taking a toll on me. Estoy fea, gorda y triste. Ergo, mi cara se ve fea gorda y triste y las actrices feas gordas y tristes no quedan en los papeles. Las comediantes tristes que no saben cómo convertir su tristeza y su dolor en chistes no dan risa. Las comediantes que no dan risa no tienen trabajo. Las comediantes que no tienen trabajo no hacen dinero. Las personas que no tienen dinero no pueden cubrir ciertas necesidades y empieza el espiral de miseria de nuevo. 

Y uno no puede decir eso en redes. No puedes decirlo porque las redes no son para decir la verdad. Son para gente insensible. El otro día monté que estaba triste y me sentía como un fracaso en un story idiota, sin hacer ni drama ni show ni mucha alharaca de ello. Estaba prendida y obviamente melancólica y dije cosas como "coño, niñitos estoy triste porque aquí en este lugar que ven fue mi último gran show. Ese show fue hace demasiado tiempo y me duele eso. Me duele tener nueve meses sin tener un GRAN show. Yo sé que acá todos ustedes son felices y perfectos y todo va bien. Pero yo no, yo no soy perfecta ni soy feliz. Perdón por tener sentimientos." No estaba llorando, no estaba en posición fetal en mi cama. Fue una reflexión de borracha y un reflejo verdadero de cómo me siento y cómo estoy. 

Perdón por tener sentimientos fue como turumpumpsssssst, un chistecito. Mucha gente me escribió "jajajaja, tranquila marica, pa' lante." Pero la otra mitad se puso toda bajaesavaina, québolas, nohagaseso, quitaesoya. ¿A cuál de las dos mitades escucho? Porque mi corazón y mi cerebro creen que no estuvo mal. Que decir la verdad y ser honesta con mis sentimientos, nunca estará mal, que ser genuina nunca estará mal. Pero mi cerebro y mi corazón se han equivocado demasiadas veces. Después de 31 años escuchándolos o ignorándolos una debería ya entender la diferencia, debería saber cuándo hacer cada cosa. 

Yo sé que ustedes no me van a creer, pero yo sé escuchar. De pana, sé escuchar. Al final termino haciendo lo que yo considero correcto, pero escucho las opiniones y los consejos de la gente. Algunas opiniones, algunas personas. No es que va a llegar Diosa Canales a darme career advice y le voy a parar bola, pues. Y en serio esta vez estoy reconfundida. 

Siento que la estoy cagando y me estoy traicionando cuando hago como si todo estuviera bien. Siento que la estoy cagando cuando digo la verdad también. ¿Cierro Instagram? No, no voy a perder todos los chats y todas las fotos en las que sí salgo linda y que sí fueron verdaderas.

Ven, ahorita por ejemplo que acabo de escribir eso Old Me hizo como YQ MARICA? O sea, qué coño importa? Qué coño importa que la gente crea que es un horror admitir que no estás bien, qué coño importa admitir que estás fracasando, qué coño importa decir la verdad, qué coño importa ser emocional, vulnerable, frágil y admitir que hay cosas que duelen, no seas pajúa. 

Quizás me ha empezado a importar porque he entendido que en lo que quiero hacer perception is truly important. I hate that it is, pero hasta que no esté IN I can´t change it. 

Los terms of agreement de las redes son demasiada paja que nadie lee. Mi propuesta es que cuando te bajes un app debería salir esta gran advertencia: 

Welcome to social media, where everything is fake and everyone pretends to be happy.